El empuje hacia el recto y el perineo

Una respiración profunda y de limpieza

Encontrar la posición que se siente y funciona mejor para usted puede tomar un poco de experimentación. Si se da cuenta de que no está progresando, intente cambiar de posición. Cuando usted comienza a sentir una contracción, la enfermera o el médico generalmente le dice que tome una respiración profunda y de limpieza. Después de eso, inhalas profundamente de nuevo, sostienes el aire y empujas como loco. Enfoque el empuje hacia el recto y el perineo (el área entre la vagina y el recto), tratando de no tensar los músculos de la vagina o el recto.

La regla en lugar de la excepción

Empuja como si estuvieras defecando. No se preocupe ni se sienta avergonzado si defeca mientras empuja. (Si esto sucede, una enfermera limpia rápidamente el perineo.) Es la regla en lugar de la excepción, y todas las personas que te ayudan a cuidarte lo han visto muchas veces antes. De hecho, el paso de las heces es una señal de que está empujando correctamente, así que felicítese. Tratar de aguantarlo sólo impide sus esfuerzos por empujar al bebé hacia afuera.

Tres veces con cada contracción

Mantenga cada pulsación durante unos diez segundos. Muchas enfermeras cuentan hasta diez o le piden a su entrenador que cuente hasta diez para ayudarle a juzgar el tiempo. Después de contar hasta diez, suelte rápidamente la respiración que ha estado aguantando, respire profundamente de nuevo y empuje de nuevo durante otros diez segundos, exactamente igual que antes. Por lo general, usted empuja alrededor de tres veces con cada contracción, dependiendo de la duración de la contracción.

La frente con un paño húmedo

Entre contracciones, trate de relajarse y descansar lo mejor posible para que pueda prepararse para la siguiente. Si su médico está de acuerdo, su entrenador puede darle algunos trozos de hielo o darle una palmadita en la frente con un paño húmedo y frío. Después de que su bebé llega lo suficientemente lejos por el canal de parto, la parte superior de la cabeza se hace visible durante sus esfuerzos de pujar. Este primer vistazo se llama coronación porque el médico puede ver la coronilla de la cabeza del bebé.
Algunas salas de parto tienen espejos para que usted también pueda ver la cabeza coronada, pero muchas mujeres no desean mirarse. (No te sientas mal o de alguna manera inadecuado si no quieres - estás lo suficientemente ocupado.) Después de la contracción, la cabeza del bebé puede volver a desaparecer en el canal de parto. Esta retracción es normal. Con cada empujón, el bebé baja un poco más y retrocede un poco menos después.